Una empresa de biotecnología logró lo que hasta hace poco parecía imposible: revivir a una especie extinta hace más de 12 mil años. Colossal Biosciences anunció el nacimiento de tres cachorros de “lobo terrible”, un animal que vivió en América del Norte y que desapareció junto con los mamuts tras la última Edad de Hielo.
Los cachorros de lobo terrible, Rómulo y Remo, nacieron el 1 de octubre de 2024, así se miraban a los 15 días, al mes, a los tres y cinco meses. Fuente: X
Los científicos nombraron a los cachorros Rómulo, Remo y Khaleesi, y explicaron que nacieron el 1° de octubre de 2024 gracias a un proceso de ingeniería genética que mezcló ADN fósil con tecnología moderna.
Todo comenzó cuando investigadores encontraron restos muy antiguos: un diente de 13 mil años en Ohio y un cráneo de 72 mil años en Idaho. Con esa información, identificaron los genes que hacían único al lobo terrible —como su gran tamaño, su pelaje grueso y sus poderosas mandíbulas—, y los insertaron en células de lobos grises. Luego, esas células fueron implantadas en perras que llevaron el embarazo hasta el final.
“Este es un momento histórico”, dijo Beth Shapiro, directora científica de la empresa, y contó que los cachorros están siendo criados en una reserva ecológica secreta de Estados Unidos, con todos los cuidados necesarios.
Aunque no son copias exactas del lobo terrible original, los científicos aseguran que tienen sus principales características. En redes sociales ya se compartió un video con su primer aullido, que no se escuchaba desde hace miles de años.
El proyecto generó opiniones divididas: algunos celebran el avance de la ciencia, y otros advierten sobre los riesgos de traer de vuelta animales de otra era. Aun así, Colossal Biosciences ya trabaja en sus próximos desafíos: revivir al mamut lanudo y al dodo.
Este nacimiento no solo marca un avance sin precedentes en la ciencia, sino que abre la puerta a un nuevo capítulo en la relación entre los humanos y la naturaleza. Mientras el debate sobre los límites éticos y ecológicos continúa, los aullidos de Rómulo, Remo y Khaleesi nos recuerdan que la extinción podría dejar de ser para siempre.
La historia del lobo terrible revive, y con ella, una era en la que la ciencia empieza a escribir su propio libro de la vida.